Cargando un poco de MI mundo...
Las ausencias son un castigo de la vida, algo con lo que no puedes vivir a diario; pero que por azares del destino tienes que ignorar y seguir y vivir con ellas -qué ironía- en fin.
Dejar una ausencia en el olvido no es difícil, mucho menos cuando esa ausencia pesa tanto en tu alma que no te imaginas hacer de todo sin recordar aquella ausencia llena de sentimientos.
Una ausencia que pesa está cargada de amor y de otros sentimientos indescriptibles, algunas son heredadas por el desamor, otras por la agonía del viento y una que otra por el tiempo.
El tiempo es tan difícil de llevar que si no existiera no sobreviviríamos mucho, pero esperar es un poco cansado para todos, incluso para la ausencias que de repente dejan de ser notadas porque se han vuelto demasiado usuales que ya nadie las extraña. ¿Que sería de ellas sin el tiempo? ¿Estarían presentes esas ausencias toda la vida?
Tienes hambre y corres a tu cocina a buscar algo, pero a veces no es tan fácil encontrar una ausencia que está agonizando, nuestro corazón trata de darle transfusión de recuerdos y mantenerla viva, pero no puede porque la ausencia ha decidido convertirse en un simple y doloroso recuerdo que más tarde correrá el peligro de no ser solicitado en la mente.
Y pese a todo esto, las ausencias son necesarias. Es como cuando dicen que la oscuridad no existe, porque es ausencia de luz. Si la luz no se ausentara no habría oscuridad, pero a veces la luz también quiere ser libre y decide abandonarnos para dejarnos en completa oscuridad... así, la presencia de alguien o algo importante se libera y se reduce a una ausencia. Dicha ausencia pesa más de lo que nos imaginamos, pero el tiempo... el tiempo hace todo con ella.
Espero mantengas intacta tu promesa, espero que seas una buena espera; porque no quiero que tu ausencia se convierta en llanto, ni que ese llanto se convierta en un suspiro, ni que el suspiro se vuelva nada, y que luego ni a los recuerdos llegue toda la esperanza que guardaba.
Dile a tu presencia que no exija libertad, porque te quiero conmigo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario